sábado, 14 de noviembre de 2009

ACERTIJO. NOV 2009


1. Acertijo

En una mesa hay tres sombreros negros y dos blancos. Tres señores en fila india se ponen un sombrero al azar cada uno y sin mirar el color.

Se le pregunta al tercero de la fila, que puede ver el color del sombrero del segundo y el primero, si puede decir el color de su sombrero, a lo que responde negativamente.

Se le pregunta al segundo que ve solo el sombrero del primero y tampoco puede responder a la pregunta.

Por ultimo el primero de la fila que no ve ningún sombrero responde acertadamente de que color es el sombrero que tenia puesto.

¿Cuál es este color y cual es la lógica que usó para saberlo?

jueves, 22 de octubre de 2009

breve relato. Octubre 2009


Tipos de elfos

(Basado en el libro “¿Cómo se llama este libro?”, de Raymond Smuyllan, de lectura muy recomendable)
Elfos de la luz

En un antiguo bosque de una época indeterminada, habitaban dos tipos de criaturas, los elfos de la luz y los elfos oscuros. Tan similares eran en su apariencia, que resultaba imposible distinguir a simple vista si uno era de un tipo o de otro.

Pero si su apariencia era la misma, no sucedía lo mismo con sus costumbres. Aunque ambas especies hablaban el lenguaje de los humanos, los elfos de la luz siempre decían la verdad, esto es, siempre que afirmaban algo, se trataba de algo cierto, y si negaba algo, era, indudablemente, falso. Sin embargo, los elfos oscuros que, pese a su nombre, eran igual de pálidos que los de la luz, negaban lo que era cierto y afirmaban siempre cosas que eran falsas. Tal era su naturaleza.

Sucedió en cierta ocasión que un viajero encontró a tres de estas criaturas juntas. La más cercana a él dijo, señalando a otra de ellas: “Mi compañero es un elfo oscuro”. El elfo aludido, sin contestar a esta acusación, afirmó: “Mis dos compañeros son del mismo tipo”.

¿Pudo el viajero saber de qué tipo era el elfo que no había dicho nada? ¿Pudo saber algo de los otros dos sin hacer más preguntas?

Envía la respuesta con tu nombre, apellidos y curso a la dirección matearb@gmail.com

lunes, 2 de marzo de 2009

Relato 2. EL DINERO DE IVÁN



Según un antiguo cuento ruso, Iván "el perezoso" se encontraba un día paseando a la orilla de un río.

-Todo el mundo me dice que me busque un trabajo o que me vaya al infierno -suspiró-. No creo que ninguna de las dos cosas me ayude a hacerme rico.

Tan pronto como acabó de decirlo se le apareció el diablo en persona.

-¿Quieres ganar dinero, Iván? -le preguntó.

Iván asintió.

-Muy bien -continuó el diablo- ¿ves ese puente? Todo lo que has de hacer es cruzarlo. Cada vez que vayas de una parte a otra, se duplicará el valor de lo que lleves en el bolsillo.

A Iván le gustó la propuesta, y ya se dirigía hacia el puente, cuando el diablo lo detuvo.

-Un momento -le dijo-. Ya que me he mostrado tan generoso contigo, creo que me merezco una pequeña recompensa por mis esfuerzos. Deberás darme 8 rublos (moneda rusa) cada vez que cruces el puente.

Iván se apresuró a asentir. Cruzó el puente y metió su mano al bolsillo. Su dinero se había duplicado por arte de magia. Le lanzó 8 rublos al diablo, que esperaba al otro lado del río, y volvió a cruzar el puente. Otra vez volvió a multiplicar su dinero. Le pagó otros 8 rublos al diablo, y cruzó por tercera vez el puente. Y el dinero volvió a duplicarse. Pero, al contarlo, descubrió que sólo le quedaban 8 rublos, que hubo de entregar al diablo, con lo que se quedó sin dinero para multiplicar cada vez que cruzara el puente. El diablo recogió el dinero, y desapareció en medio de una sonora carcajada.

¿Cuanto dinero tenía Iván en el bolsillo cuando hizo su particular pacto con el diablo?

martes, 17 de febrero de 2009

Relato 1. UN PAR DE COFRES


(Basado en el libro “¿Cómo se llama este libro?”, de Raymond Smuyllan, de lectura muy recomendable)

Había una vez en una ciudad dos fabricantes de cofres de gran fama, Alberto Alves y Bernardo Bellini. Sus cofres han pasado a la historia por su gran belleza y su preciso acabado, de manera que a menudo son más apreciados por ellos mismos que por su contenido.

Había una particularidad que distinguía un fabricante de otro. Mientras que Alberto Alves siempre ponía a sus cofres inscripciones verdaderas, Bernardo Bellini escribía sobre sus obras inscripciones siempre falsas.

Los hijos de ambos se dedicaron a continuar su obra, de forma que los hijos de Alberto Alves siempre incluían en sus obras inscripciones verdaderas, y los de Bernardo Bellini incluían inscripciones falsas.

A menudo, estos cofres, eran construidos a pares, y engarzados de tal forma que no podían separase sin arruinar parte de su valor. Esas obras podían ser creadas por artesanos de ambas familias trabajando juntos, pues pese a sus diferencias en ocasiones colaboraban. Pero cada cofre estaba hecho y firmado siempre por una única persona.

Recientemente encontré un par de tales cofres, indudablemente de aquella época, que tenían las siguientes inscripciones: en el dorado ponía “Los dos cofres de este juego son obra de alguien de la familia Bellini”, mientras que el otro, plateado, afirmaba “Ninguno de estos dos cofres es obra de un hijo de Alberto Alves, ni de un hijo de Bernardo Bellini”.

¿Puedes identificar con esto a sus fabricantes, es decir, si fueron hechos ambos por uno de los fabricantes, o por sus hijos, o cada uno por una persona distinta?

Presentación de los "relatos matemáticos"

El profesorado del departamento de matemáticas al objeto de mejorar la comprensión lectora de nuestro alumnado y de fomentar su hábito lector, incluirá en este blog una serie de relatos breves relacionados con contenidos matemáticos a los que hay que buscar la solución.

Estos cuentos con problemas o problemas contados han sido escritos con la intención de entretener y hacer pensar tanto a los que muestran su rechazo a las matemáticas como a aquellos que están convencidos de que las matemáticas deben ser muy serias.

Queremos demostrar que las letras y números no están reñidos y nuestro principal deseo es que participéis activamente en la lectura para encontrar la solución; una vez lograda debéis enviarla a la dirección de correo de nuestro departamento: matearb@gmail.com o, a través, del apartado comentario. Se tendrá en cuenta el número de relatos leídos con su solución correcta que redundará positivamente en vuestra asignatura; a final de curso habrá premios para los mejores participantes.

Así pues, ahí va esta mezcla de problemas matemáticos, relatos literarios y, a veces, sentido del humor. ¡Participa y Colabora!